No se puede vivir en el fastidio; pero tristemente llega, y a veces se queda un muy rato.
A mí me a menudo, más frecuentemente de lo que me gustaría aceptar. A veces hasta se mezcla con depresión, y es difícil de distinguirlos.
Y aunque la (muy ocasional) vida de rock star me hace olvidar o superar esa situación precaria, sería genial poder tener la mente optimista y abierta a lo que venga.
Siempre es una mezcla de aburrimiento y de que mis expectativas no se cumplan, y dada mi formación es difícil (vaya lo es) no reaccionar como lo hago.
Por eso me pierdo en el trabajo y lis vídeo juegos, porque al menos me mantienen distraído. Pero la realidad es que me gustaría estar viviendo alguna aventura, o entregarme de lleno a la vida punk.
Desde luego, ser punk no es opción; y por más que trato en crear o encontrar aventuras, estas se escapan. Aquí vale la pena aceptar que no es sano para mi arriesgarme mucho; sólo espero que las aventuras se den el contexto de lo posible; forzar una aventura, es como forzar cualquier cosa.
No es noble vivir así, a la vez que es tonto. Pero es aún más tonto vivir en la expectativa, hasta en la zozobra. Creo que lo sano es seguir adelante hasta que las circunstancias den nacimiento a esas aventuras, a las vivencias que marcan la vida.
Obviamente, espero que tales aventuras y/o vivencias no me dejen más fastidiado o deprimido de lo que ya estoy.