miércoles, 22 de febrero de 2006

Martesitos I

Pues la onda de reuniros exprefectos y camadas anexas comienza a dar sus frutos. Aunque debo de decir que de repente me siento fuera de contexto; pero poco a poco me reintegro al grupo. Es natural, pierde sensible año y medio de un grupo y te sentiras como fuera de contexto.

Precisamente por eso me pareció genial la idea de reunirnos una vez por semana, cada semana. Es genial. Ahora el ambiente es distinto, hablamos de otras cosas. Ya el tema central no es el mismo del que era toda la vida: la prefectura. No nos quejamos de mala organización, de los jefes, del Tec... Las charlas han tomado otros horizontes.

Por ejemplo ayer. Hablamos sobre política, el trabajo, computadoras, chismes hogareños. Salió a relucir algún tema del Tec... pero bien pude darme cuenta de la diferencia de ambiente y mentalidad que hay en el Tec, al que hay fuera. Debo de decirles que así estaba yo (o todos), pero agradezco ver otras perspectivas.

Creo que eso enriquece cuando nos juntamos. No nos tomamos en serio (que es algo que había perdido) y podemos burlarnos de todo. Hablamos de las noticias: los mineros, Marin... de los candidatos y los roomates. También aclaramos cosas importantes para nuestra reunión. Y no faltaron los cigarros, el refresco ni el pastel.

Ahh, que así siga. Que nos sigamos viendo por un muy buen rato todos, mientras estemos cerca... y ¿por qué? Cuando estemos lejos.

martes, 21 de febrero de 2006

Hay cosas con las que no se juegan

Ayer vi una película con Alex y Camarón. Trataba de EVP (Electronic Voice Phenomena, por sus siglas en Inglés), es decir, que si dejas una videograbadora o una grabadora en un lugar por algún tiempo grabando estática o ruido blanco, eventualmente se podrían escuchar voces de gente que está 'del otro lado', o sea, en el más allá.

Si ustedes vieron 'The Sixth Sense', recordarán que Night toma este evento en una escena, que es en la que Bruce Willis escuchá la grabación de su paciente (que es el chavo que al principio de la película le dispará y luego se suicida) y cuando pone atención al ruido se escuchan voces.

No me gustaría entrar en la discusión si hay vida más allá o no; mi convicción es que "polvo eres y al polvo volverás", o sea, cuando muera, no habrá más para mí, ni aquí, ni en el cielo ni en niguna parte. Esa es mi convicción.

De lo que sí me gustaría hablar y hacer incapié, es que hay cosas con las uno no debe jugar. Por ejemplo, tratar de comunicarse con espíritus. ¿Han escuchado los casos de la gente que juega con la Ouija y luego le pasan cosas raras? Bueno, es cierto... créanlo. Mi Igual les podría dar una cátedra sobre todo esto.

Sé que va a sonar medio joligudense, pero de verdad, quién juega con eso, ¿sabe lo que hace? Yo pienso que si los espíritus están en un plano distinto al nuestro, que son una energía distinta a la nuestra, pues por algo es, quiero decir, estamos separados por algo. Es como en los hospitales, donde todo está separado: urgencias de cuidados intensivos, cuneros de enfermedades terminales. No es natural que los seres humanos tratemos de hablar con espíritus; que sea normal, común, no quiere decir que esté bien.

Si ustedes creen en Dios y han leído la Biblia, recordaran las posesiones de la época de Cristo. La gente no se veía beneficiada del contácto con estos espíritus. Con el EVP la gente también entra en contacto con los espíritus (de una u otra manera); siento que esa relación es peligrosa.

Si tomamos las creencias más comunes sobre la vida y la muerte (que el espíritu se desprende y viaja a un lugar, como el cielo o el infierno), me viene preguntas como: ¿qué hacen esos espíritus deambulando por la Tierra?, ¿dejaron asuntos pendientes? Si fuera esa la lógica, Dios creador hubiera establecido los medios naturales para ayudarse entre los espíritus y los hombres, ¿no creen? Porque, vamos a ver, si el cielo es la gloria y el infierno el cástigo, ¿resulta que ahora debo dejar todos mis asuntos cerrados para no quedarme atrapado en la Tierra?, ¿qué clase de asuntos son los que no debo dejar pendientes?, ¿no se pueden arreglar desde el cielo o el infierno? Y si es cierto que cuando estás en el cielo, puedes regresar a la Tierra, ¿no sería más fácil reencarnar, en vez de andar deambulando? Pero como todo esto es una maraña de cosas que, a su vez, difícilmente comprendemos, es un buen argumento para pensar que es peligroso jugar con el contacto con los muertos.

Yo creo que cual actividad paranormal es real, pero no porque sea real quiere decir que nos incunba. Habrá quiénes digan que entrar en contácto con muertos no siempre es peligroso; yo insistó que si fuera normal, no debería haber ninguna novedad en nuestro contacto con ellos.

Aun si toda la retórica que les di les parece absurda y extremista, piensen en esto: ¿qué ganaran con jugar con cosas que no compren o ni entienden? No molesten a los muertos, se merecen su descanso y nosotros seguir con nuestra vida como vivos.

lunes, 20 de febrero de 2006

Salado

Ayer salí con Alex, Camarón y la Coss a jugar billar, la peor tanda de billar que alguna vez he jugado. Si mi papá se entera, casi casi me desconoce como su hijo.

Pues ahí vamos a jugar. Y no es que haya jugado mal per se, es sólo que metí indebidamente varias veces la bola negra. Damn! O sea, no es nunca hubiera metido la bola negra por error, pero de 5 juegos la metía una vez. Esta noche fácil la metí como 5 veces; estoy hablando que jugamos 2 horas y sólo ganamos 3 (Alex y yo) juegos de como 8 que jugamos, y las veces que ganamos fue por se ahogaron los amigos y una vez ganamos jugando el juego completo (meter todas nuestras bolas y al final la 8).

Llegó un momento que Alex y yo nos veíamos nos reíamos, porque nuestro juego realmente apestaba. Bueno, tuvimos que haceros de nuestros métodos para poder avanzar en el juego; de eso también nos reíamos.

Hoy, me encamino al trabajo, tomo la ruta usual. Andando, tomo Cuauhtemoc, para agarrar la salida Constitución hacia el norte (para los que no se ubiquen, estoy en la ciudad de Monterrey). Precisamente, ya en el punto de tomar Constitución, salgo a asomarme un poco para ver si puedo tomar la avenida; estoy viendo si puedo pasar, cuando de repente siento un golpe por atrás. Una camioneta se aventó sin precaución y me dio un "besote". A mí me tocó darme un frentaso con la ventana y por un instante me quedé desconsertado. Trate de hacerme a un lado para que pudieramos estacionarnos y ver qué paso. ¿Pues me creeran que jijo de su madre patría salió por piernas? Así es queridos conciudadanos, el mal parido, con su pinky camioneta Lobo (que obviamente no le había pasado nada al chocar encontra del Chahuismovil, que es un noble Chevy), se dio a la fuga, valiendole 3 cacahuates podridos lo que acababa de pasar. A mí tomó como un minuto entender todo esto, volver a comenzar la marcha, y comenzar a avanzar. Cuando tomé la vertical de nuevo, me dio mucho coraje todo lo que pasó.

Al llegar a la chamab, revisé la defensa trasera: no le había pasado nada al carro. En fin, por lo menos.

Sólo ando salado, no es que sea un mal día... para malos días, les podría platicar de la vez que una piedra me atacó, después de no tener dinero para pagar el servicio del carro, después de levantarme casi muerto, porque la noche anterior...

martes, 14 de febrero de 2006

La Amistad

amistad.
(Del lat. *amicĭtas, -ātis, por amicitĭa, amistad).
1. f. Afecto personal, puro y desinteresado,
compartido con otra persona, que nace y se fortalece con el trato.

- Diccionario de la Real Academía Española de la Lengua
No es que sea partidario del celebrar el 14 de febrero, porque - como mis amigos y roomate podrán constatar - no tengo un día particular para decirles que los quiero o demostrarles mi cariño; sin embargo, dado que la mayoría anda un tanto suceptible el día de hoy al tema, se me hace una buena ocasión para decir algunas cosas.

Quisé tomar la definición que les presento, porque explica muy bien qué es amistad, incluso, desde mi punto de vista. Es decir, la amistad no se circunscribe a un grupo de personas, como sería el caso de aquellos a quiénes llamamos "amigos", si no que puede ir más allá.

En mi muy personal manera de ver al mundo, manejo los siguientes estratos: conocido, cuates, amigos. Desde luego dejo fuera a la familia y la novia, porque se supone que la amistad no determina el tipo de relación que se tiene con ellos, dados los lazos.

El conocido es aquella persona que con frecuencia veo o trato, pero no pasa de ahí. Un ejemplo cualquiera, sería el guardía de la entrada, la señora de la limpieza, el mozo de aseo, etc. Pero la diferencia residente en que ellos (como yo) siempre están dispuestos a hacer cosas por mí, porque les caigo bien y viceversa. Además, me agrada verlos, porque a veces me hacen el día con algún comentario o acción desinteresada.

El cuate, por otro lado, es una persona que ha tomado un significado en mí vida, ya sea por una experiencia juntos o alguna enseñanza. En mi caso, el ejemplo más claro es el de mis maestros o de quiénes han sido mi 'jefes' en algunas ocasiones. Con ellos comparto mi vida de repente, pero no vamos siempre en el mismo camino; aunque si necesito de su ayuda o consejo, siempre están ahí. Es decir, no he compartido secretos ni cosas íntimas con ellos, pero a lo mejor he vivido momentos importantes.

En este rubro también entran algunas personas que compartí algún momento importante de mi vida. Por ejemplo, teatreros, mis hijos más apegados, compañeros de carrera, compañeros de trabajo, entre otros. La mayoría de ellos puedo decir que los quiero y aprecio muchísimo, porque me han ayudado, hecho reir, incluso estremesido en algún momento de mi vida. A todos ustedes, muchas gracias.

Y mis amigos... Jesucristo dijo una vez que sus amigos eran aquellos que iban con él todo el tiempo; parte de ese texto da a entender que los discipulos que afrotaban lo bueno y lo malo con él, esos eran sus amigos. Y creo que es una manera fácil de mencionarlos, sin enlistarlos. En su momento mi papá me dijo que amigos se tenían pocos en la vida. No sé que tanto sea "poco" para mi papá, porque he descubierto que mi "poco" ya casi es "bastante" en lo que a amigos se refiere.

La mayoría de mis amigos me han visto llorar, enojarme, estar en las peores depresiones de mi vida, salir de ellas, estar triste, estar alegre, los he hecho reir, los he hecho llorar... pero lo más importante es que vamos juntos, nunca nos dejamos y nos hacemos participes de nuestros gozos y alegrías. Y sí, nos peleamos, algunas veces nos enojamos y hasta nos dejamos de hablar (algunos por más tiempo que con otros). Mis amigos siempre dan sin esperar a cambio, porque saben que haré lo mismo. Mis amigos me buscan la mayor parte del tiempo porque quieren verme, no porque necesiten un favor; pero cuando necesitan un favor, saben que cuentan conmigo. Mis amigos saben que podemos dejar de vernos años y que siempre que nos veamos será como si ayer nos hubieramos dejado.

Zarathustra decía que su mejor amigo, es también su mejor enemigo, porque es quién mejor nos conoce. También, decía que uno debe perfeccionarse para ser el super-hombre, pero para lograrlo, el hombre debe destruirse así mismo y entonces, de esta destrucción - como el Fénix - nacería el super-hombre, que tarde o temprano se autodestruiría otra vez, para volver a resurgir. Así, el super-hombre veía en su amigo el enemigo ideal, porque todos vemos en nuestros amigos la persona que queremos superar; y que si la desctrucción de un hombre lo llevaba a la creación de un super-hombre, entonces, nuestros amigos (que son nuestros mejores enemigos) pueden ayudarnos a crear ese super-hombre, y nosotros, a la vez, ayudarlos a ellos*. (Luego se las rolo, está muy buena y yo la sembré).

Finalmente, a todos estos (mis amigos, amigas) les puedo decir, lo que por inspiración dijo el apostol (y ustedes conocen como la mejor definición sobre al amor):

"El amor es sufrido y bondadoso. El amor no es celoso, no se vanagloria, no se hincha, no se porta indecentemente, no busca sus propios intereses, no se siente provocado. No lleva cuenta del daño. Todas las cosas las soporta, todas las cree, todas las espera, todas las aguanta".

- Apostol Pablo, Primera Carta a los Corintios 13:4-8

Los amo.


* Por si le interesó el tema (y quizá me saquen de un error) esta filosofía es parte de "Así habló Zarathustra...", de Frederick Nietzche.

'Deja te busco un regalo'

"Estoy muy dañado por el concierto de U2... hoy no vo' a trabajar, hoy no vo' a trabajar". Sí, así es, el lunes sentía como si hubiera caminado durante un recorrido para un camping (ah, pues sí, verda'?).

Pero después de ponerme en pie, sólo había un par de pendientes en mi cabeza: comprar ipod, comprar regalitos para las Porras, el regalo de Alex, pasar a dejar los triques de las Porras y sus respectivos regalos y despedirme de la Porras.

El status final:
  • Ipod: Se acabó en menos de 8 días, espero que para la siguiente semana encontrar.
  • Regalos: Done. Encontré todos los regalos adecuados.
  • Dejar triques: Done. Se hizo la separación entre lo que era de ellas y lo que no era.
  • Dejar regalos a las Porras: Done. Me encantó la reacción de ellas. De hecho, la rección de la Porras fue aun más sorprendente. Después de recibir su regalo, me dijo que buscaría uno; al principio pensé que lo decía en broma. Pero cuando apareció con un libro de Gabo (Relato de un naufrago que estuvo diez días a la deriva en una balsa sin comner ni beber, que fue proclamado héroe de la patria, besado por las reinas de la belleza y hecho rico por la publicidad, y luego aborrecido por el gobierno y olvidado para siempre) y me lo dedicó, ya fue muy en serio... eso fue agradable. Pero también me pareció agradable la reacción de la Porrista, porque me puso una antención que no conocía de ella, fue inesperado, pero me agrado (ya ven que por lo regular no inesperado es bueno para mí) y no es como que no puedo evitar notar esos detalles de su parte.
  • Despedirme de la Porras: Done. Y fíjense, estuvo a punto de irme sin decirle lo más importante: "Porras, vive tu vida". Aunque ya nos habíamos despedido, no fue hasta que le dije eso que cobró sentido toda su visita y la tan renovada amistad entre nosotros. Ahora hay un cariño muy especial entre los dos.
Y en vista que mi día había sido todo un éxito, pude pasar a visitar a Pollito a su cantón. Definitivamente, hay veces que siento que la casa de Pollo es mi segunda casa (aunque la mamá de las Porras ya me prometió su casa, para ser mi segunda casa también... aunque creo que eso no depende de mí * risas *). La mamá de Pollo me antendíó de lo lindo; estaban cenando cuando aparecí y como si fuera el amigo de la infancia de Pollo, me pidió que me sentará y me invitó a cenar... no podía rechazarlo.

Al final del día, me fui a dormir con mucha satisfacción, porque me sentí importante, que hice cosas buenas por aquellos que quiero y me interesan y porque hay gente que de verdad se preocupa por mí... cualquiera hubiera dormido como bebé.

lunes, 13 de febrero de 2006

De Misiones... para ver a U2

Sé de muchas personas que se han ido de Misiones*, pero sólo he estado realmente cerca de una. Calixto Pérez (algunos de ustedes lo recordaran por ser el verdadero dueño del cuardo 102 del IX, no el prefecto). Este amigo se fue de Misiones mientras vivíamos juntos y regreso hambriento, sediento, adolorido, mal dormido y mugroso. "No me bañé en una semana, pero valió la pena la experiencia", declaró. Para que Calixto le valiera no haberse bañando en una semana, déjenme les digo, que de verdad fue LA experiencia.

Bueno, eso no dista mucho de la experiencia de este fin de semana. Pero valió más la pena porque estuve con las personas adecuadas.

Desde hace dos meses las Porras y un servidor habíamos hablado sobre el asunto de ir a acamparar para agarrar buen lugar para el concierto. De hecho, durante la semana la Porrista estuvo mandando correos, para organizarnos y escoger horas para la guardia.

Para no hacerles el cuento muy largo, la dichoso organización valió cacahuate. De repente, la Porrista ya estaba en la fila... desde el viernes a las 11:00 pm. La Porras y su servilleta llegamos a las 3:00 pm para relevarla; yo me quedé de guardia hasta pasadas las 11:00 pm (porque cuando ya nos íbamos, resultó que U2 comenzó a hacer la prueba de sonido).

Esa noche no pude dormir. Uno de los sueños que tuve (producto de preocupación por todo el asunto de agarrar buen lugar) es que llovía - que era parte del pronóstico del tiempo para el domingo - y se inundaba la butaquería que estaría hasta adelante; pero todos estabamos tan emocionados, que nos valía y no sentabamos en la butaquería, donde a cualquiera le llegaba el agua al cuello. En mi sueño vi a estos dos chavos de Puebla, muy buena onda (de los 10 poblanos buena onda que conozco).

Desde las 3 recibía mensajes que me mantenían al pediente del status para entrar al estacionamiento del estadio. Hasta que por fin, a las 4:00 am, recibí la llamada: "¡Ya, lanzate ya al estadio! Ya están entrando". No es que no fuera algo importante, pero mis ojos dijeron: "What?" y se cerraron como 15 minutos más.

Así, a partir de las 4:30 am del domingo hasta las 11:15 pm estuvo en el estadio Tec. Haré una rápida reseña ocurrida en ese lapso de tiempo: toparme con el Majama, toparme a los poblanos buena onda, cambiar mis boletos, tratar de dormir, mentarle la madre (varias veces) a unos juniors que se querían colar, mandar mensajes que no llegaron, marcarme como celero, echarle porras (no a las Porras, ni las Porras) al Potrillo, morir de sueño, frio, calor, hambre y sed, hablar como nunca con Alex, entrar al estadio, compartir la comida y la bebida con todos, dormir como hermanitos Alex y yo, hacer nuevos amigos, mover la melena con "Las Maquinas Secretas", cantar con voz en cuello las rolas de U2, tomar algunas fotos y videos, dejar de brincar porque las piernas y los pies me dolían, salir del estadio, ir por el carro de Alex, ir a cenar con Camarón y Xoch, recoger mi carro, regresar a la casa y dormir. (uff)

'¿Qué te parece, eh?' (diría mi brody). De las cosas sobre salientes, es que nunca estuve tanto tiempo tan cerca de la Porrista y nunca pude siquiera charlar con ella más de 5 min (LOOOOOSER!). Pero estuve charlando como cinco horas con Alex, como nunca en la vida; creo que nos queremos más que ayer, pero menos que mañana (ay no ma... nito). Me di cuenta que Ale (la amiga de la Porrista) es más que una niña bonita... es más, me gustó - pero en esta historia, la Porrista lleva la preferencia todavía. Conocí a Alex (el ex de la Porrista) y después del trato que me dio, sólo me pregunto: ¿por qué cortaron? El tipo la adora, ella lo busca para todo, él es buen mozo y ella preciosa... pues, ¿a dónde se fue el mundo? Ah, y sólo por no dejarlo pasar, me metí una asoleada, marca "EstuveEnLaPlayaDuranteSemanaSantaPeroNoUseBloqueador".

¡Hey! Lo logré, pensé que no podría resumir todo en tan poco. Así, como Calixto, que estaba bien mal pasado en todo (sí, incluso oliendo a chivo) puedo decir que fue LA experiencia.

* Para aquellos que el termino no le es familiar, una "Misión" es cuando un grupo de personas se lanzan a zonas alejadas, a ayudar a una parroquía en particular. Van de casa en casa hablando con las personas de la doctrina católica. Por lo regular, lo hacen en Semana Santa o fin de año.

sábado, 11 de febrero de 2006

Necesadades

Cuando vi que dieron las 4:00 p.m., pegué la carrera para huir del trabajo. Un poco de la urgencia, era la necesidad de liberación (estar con la misma cantaleta del trabajo durante la semana, la verdad, no fue tan soportable) y de sentir que ya se acercaba el día para el concierto de U2.

En fin, pongo pies en polvorosa y llego a mi casita. Según esto, Camarón caería más tarde a la casa. Pero mientras yo seguí conquistando terriotorios en Los Santos y viendo como se armaba un safarrancho en esa ciudad (¿por qué siempre me quitan mis territorios? No es justo). Hasta que al fin me harté, sintonicé (nótese la propiedad) CSI. Me puse mis pijamas, luego apareció Camarón.

Pues la idea que Mr Shrimp cayera a la casa era evitar salir y verme envuelto en un reunión en la que yo terminará mal.

Ahora, no es que me pareciera extrañana la visita de Camarón a la casa, es sólo que hubo partes en la charla en que noté que su visita era muestra de una preocupación:

- "Wey, no mames, es a quién chingadamadre se le ocurre jugar 6 horas XBOX"
- "Ay, ay, ay... bájale, que tenía meses que no hacía eso. Además, para eso lo compré. Contado que el GTA lo tengo desde verano, se podría decir que es un desperdició, ¿no?"
- "Sí wey, pero no mames... y ¿toda la semana? O sea, pues tienes que preocuparte por tu vida social".
- "Wey, lo dices como si todo el tiempo lo hiciera. Además, ese fin de semana tenía ganas de hacer algo más tranquilo, ¿ok? Sólo que me remordió la conciencia ver a Alex con planes".
- "Pero, wey, no mames... ¡6 horas!"

Después superamos esa charla, sobretodo cuando comenzamos a hablar sobre Ninja Gaiden y lo dificil que estaba.

Más adelante entramos en una plática, que nos consumió un buen rato. Francamente, sentí como si estuviera retomando unas de esas consultas Dr Corazón de mi época de prepa. Del tema no hablaré, porque se involucran personas queridas, pero he de decir que el resumén de la charla está en dos frases: "El que no habla, Dios no lo oye" y "Es más fácil lidiar con lo que digo, que con lo que no digo". Pero me dio mucho gusto ayudarle a Camarón a ver las cosas desde otro punto de vista.

Pues no sé en qué momento, la Coss le llama el Camarón, para invitarnos a su cantón. Pues de algunas deliveraciones, llegamos a la casa hogar (pues una casa es un hogar, ¿no?), donde - para no variar - la gama de acontecimientos acontecidos (repetición para dar énfasis) estuvo de a peso; incluso, dicen que yo participé (y quizá, pero eso de que ando rechazando invitiaciones sin darme cuenta, pues quedó demostrado que no era del todo mi culpa). Y sí, se notó que Nemo está bien apuntado...

Así, sin darnos cuentas, dieron las 5:30 am (y no, nos encotró desnudos la luna) y la retirada era enminente. Lo bueno que no tuve que llegar a cambiarme... sí, llegué a dormirmé con lo que traía puesto, pues ¿en qué momento les dije que me quité las pijamas para salir?

El efecto 'dedo' o 'champiñon'

Después del blog de ayer, varios me pregunta: "¿Qué es 'el efecto "dedo" o "champiñon"'?" (Que bueno que no cobran por comillas en este servidor). Bueno, es un efecto bien común, que estoy seguro a todo el mundo le ha pasado en alguna ocasión.

Cuando van a donde sea que se conglomere más de dos a más personas y te dejen a un lado de cualesquiera actividad esté ocurriendo ahí, ahí, ahí está ocurriendo un efecto de estos. (Ah, ¿ya ven que sí lo conocen?)

En esta ocasión, no me referiré a una de las ocasiones en el que me he visto en vuelto (que una de las peores ha sido estar atrapado en un catamarán por unas cuatro horas), si no de una de la veces que no ocurrió y al final fue parte del tema.

Se hayaba el ser más hermoso, inteligente y gracioso de esta era (sí, Chahuistle) en un profundo pensamiento ("Jajajaja... controlo más del 60% del territorio de Los Santos, Muajajajaja"), cuando su noble amigo Pollo, noblemente lo invitó a beber en un lugar cercano... o sea, que fueran por unas cheves al changarro del Omar.

En fin, estos intrepidos compañeros, se lanzaron al lugar. Después de unas burguers, se reunieron con otros dos camaradas a hablar - sobretodo - de las noticias de su grupo de conocidos, de hecho, la charla de ese rato sólo giro alrededor de personas y eventos que Chahuistle desconocía.

Y cuando más 'dedo' se sentía, entonces Omar volteaba y le explicaba de 'pe' a 'pa' el significado de todas las cosas que hablaban. Claro ejemplo de esto, el asunto del caballo libre en la pradera; concepto que se volvió punto de referencia para los demás concurrentes (y los no concurrentes). Así, en dos charlas más, Chahuistle fácilmente pudo incorporarse en la charla .

Al regresar a su morada, Chahuistle le comentaba a Pollo de lo agradable que siempre era asistir a las reuniones de sus camaradas, pues nunca se sentía fuera de contexto. Pollo, entonces, explicó su sentir al respecto: "Eso es lo que yo digo cabrón. ¿Verdad que no soy yo? Porque, mira wey, muchas veces le he dicho a (CENSURADO) que no es que sea un mamón, es sólo que sus amigos nunca me metén en contexto y siempre están en su pedo".

Así, es todos sufrimos de vez en cuando el efecto 'dedo'. Pero que bueno que siempre existen personas atentas que gustan de nuestra compañía y nos situan en medio de la flatulencia.

viernes, 10 de febrero de 2006

Invitación Inesperada

Me encontraba yo en un momento de agudo entendimiento de mi ser, expresión de mis pensamientos e interacción con mis iguales, en un sentido digital (es decir, estaba chateando), cuando recibí un mensaje de La Chica de las Fotos. Obviamente me saqué de onda (obviamente), de hecho no sabía ni que decir, así que como que sólo iba siguiendo el protocolo.

Pues qué sorpresa (sorpresas te la vida, ay Dios) que el mensaje era para invitarme a su reunión de cumpleaños que sería el miércoles en el Nirvana. Eso fue muy, pero muy inesperado, pero no desagradable.

Tendría que hacer un poquito de historia, pero no tiene caso, la verdad. Pero lo que si les puedo decir, es que La Chica de las Fotos vale la pena, mucho, mucho. Valoro mucho en una mujer que sea cortés conmigo; es decir, que si sabe que me gusta o quiero con ella, en vez de traerme dando de vueltas, porque no se atreve decirme que hoy (quizá nunca) habrá algo entre nosotros. Eso también incluye que aun a pesar de su rechazo, me siga buscando y apreciado. La Chica de las Fotos, la Porrista y la Ausente han sido esas chicas corteses.

¿Ven? De alguna manera uno siempre se fija en el mismo tipo de personas (quizá por eso siempre cometemos los mismos errores).

Pero este blog no es sobre mí, si no sobre La Chica de las Fotos. En fin, acababa de decirme que le cayera en su reunioncilla, cuando agrega: "¿Qué crees?". En este momento les puedo decir que de antemano ya sabía que la respuesta tenía que ver con 'ya hay novio'. Pero obvio, es más padre cuando no te ves tan sabelotodo:

- "¿Te dieron chamba en Playboy?"
- "Nooo"
- "¿Maxim?"
- "Mmm... bueno fuera, pero no"
- "No, pues me rindo"
- "¡Ya tengo novio!"
- "¿Neta? ¡Felicidades!"
- "Y es amigo del Kalli, ¿tú crees?"
- "¿En serio? Que buena onda. Que pequeño es el mundo, ¿desde cuándo andan?"
- "Una semana y media"

Y típico, cualquier hombre, genera pensamientos reprobatorios sobre los novios de sus amigos (y más si es amigo del Kalli - carcajadas -, no es cierto brody, tú sabes que te quiero). En fin, le prometí que caería.

Así fue, llegué. Y no tan típico, pero a veces conoces el tipo y resulta que es un tipazo... y pues sí, así fue.

En la primera oportunidad, ella se dirijio a mí:

- "Me da gusto verte. Tenía rato de no verte"
- "Sí, así es, desde septiembre" (Mentira, haciendo un recall, la última vez que nos vimos fue en mi casa en la fiesta después del examen de teatro y en el triufo de los Borregos, o sea, 18 de noviembre)
- "¿Ah sí?"
- "Sí, acabo de encontrar un blog que me dio la fecha. Fues cuando fuimos al Koko... ah, no es cierto, fue después de la función del domingo de 'Fotomatón'"
- "Ah, orale, entonces sí teniamos rato de no vernos. Oye, pues que bueno que venistes, me da mucho gusto verte"

'Me da mucho gusto verte'; después de esa frase, me dije: "Claro, ahora recuerdo porque me gusta". En fin, después de un rato, vino sobre mí el efecto 'dedo' o 'champiñon' y preferí en abortar la misión. Ella se levanto para darme un abrazo y despedirse.

Por eso, cuando quiero quejarme sobre las mujeres ("Todas son iguales"), recuerdo que eso no es cierto, que es una manera de azotarse nada más. Siempre hay mujeres que valen la pena... siempre.

"¿Sabes qué? Que te quiero mucho"

Sé que les atraerá el título. Sé que querran saber quién me lo dijo (porque de otra de otra manera no lo hubiera puesto entre comillas).

Bueno, pero antes dejen que les platique de mi abuelita. Mi abulieta es una señora que anda alrededor de los 80 (me imagino que como toda mujer, no le gusta decir su edad). Doña Edith Capitaine Coutorier, progenitora de mi padre, es una señora que de haber sido de estirpe italiana, nos hubiera vuelto a todos una especie de familia Corleone, comenzando por mí papá (el mayor de los varones).

Mi mamá me ha platicado unas historias, que en parte me tocaron verlas y vivirlas. Como la típica mamá de mediados del siglo XX, hacía de comer como si todo un regimiento completamente hambriento fuera a comer a la casa; aunque estamos hablando que en la familia eran 7 hijos (Edith, Lourdes, Gerardo, Pablo, Elizabeth, Eduardo y Ernesto) más Don Gerardo (es decir, mi abuelo), más los que caían y los que ayudaban en la casa - entonces creo que sí, estamos hablando de un número respetable de personas que alimentar. Las horas para comer, ver la tele y dormir son claros en casa de mis abuelos; mi abuela es como el sol y la luna en eso. De ahí que era la que ponía orden, por ejemplo, en la mesa entre los hijos y los nietos. Yo odiaba ir a San Rafael (lugar de origen de la familia Thomas) por el hecho de aguantar levantarme a las 5:30 am para desayunar con mis abulos; y aunque las otras comidas tenían horarios más flexibles, el hecho de tener que comer todo lo que me servía mi abuela y no poderme levantar, bajo la amenza de ser ajusticiado por el famosísimo 'amanzalocos'. Todo era un suplicio: mi abulea praticamente me tenía vigilado todo el tiempo y para todo había un fuerte 'no'.

Así, mi abuela para mí era el verdugo más inescrutable y descorazonado que existía. La imagen de mi abuela no era la que tenía del resto de las abuelitas que conocí o mi abuela postiza (porque tengo una abuela postiza). De hecho, podría decir que mi abuela y yo no nos llevabamos de ninguna manera; todo pintaba para que las cosas así fueran.

Pero algo paso: mi abuela cambió. ¿Cómo?, ¿Por qué?, ¿De qué?, ¿Cuándo? Bueno, definitivamente hay muchas razones e historias. Pero esa mujer implacable y dura, se ha convertido en una dulce y amorosa abuelita. Ella misma se ha dado cuenta que ser así, le trae más gustos que antes.

Hoy, llamó a mi papá que estaba en casa de mi abuela para hablar de negocios y me contesto mi abuela. En su platica se veían las ganas de charlar conmigo y antes de soltar el teléfono para darselo a mi papá, sin que el la escuchara, me dijo: "¿Sabes qué? Que te quiero mucho".

lunes, 6 de febrero de 2006

"Esto es algo de hombres" o esas pequeñas diferencias

Sábado por la noche, como a eso de las 8:00 pm. Estuve jugando GTA (San Andreas) desde la 1:00 pm. Todo iba muy bien, en seis horas (que bueno que sabe contar) había avanzado en el juego todo lo que había avanzado en una semana jugando en promedio 8 horas díarias*. Lo anterior, porque como ustedes recordaran (hecho publicado en este blog el 22 de marzo del 2005, cuando en aquella mañana me topé con aquella niña que aun NADIE me da razón de ella) estuve dedicado hace tiempo a jugar GTA, pero en el PS2 de Jimmy, así que volví a empezar ahora que compré el XBOX.

Como les decía, todo iba bien... hasta que vi que Alex comenzó a movilizarse en la casa:

- "¿Ya tienes plan para hoy?" (Plática privada: Espero me diga no, para ir al cine juntos)
- "Sí"
- "Ahhhh... ¿qué vas a hacer?"
- "Voy a una fiesta con unos amigos"
- "Ah, cool"

Después de eso, comenzó en mí una charla interna que decía: "Wey, no manches; sigues en pijamas. Desde la 1:00 pm que te levantaste has estado jugando GTA... ¡por seis horas! ¿No crees que en vez de estar de nerdo antisocial, deberías salir con tus amigos?". Entonces me dije a mi mismo: "Mi mismo... ¡tienes toda la razón!". Así, tomé el chahuismisor (o sea, el celular) y mandé mensajes hasta las partes más distantes de Monterrey; en eso, que el Chalo, respondé al llamado (sonido de la batiseñal: tara-rara!).

- "¿Qué me propones?"
- "¿Qué plan tienes?"
- "Pues, ¿cuál es tu idea?"
- "Lo más que te puedo ofrecer es ir por unas cheves al Jac & Ray o comprar algo e ir a tu cantón".
- "Mmmm... mira viejo, Clau, una amiga de ella, un amigo mio y su novia vamos al un lugar por el Gibas... ¿te acoplas?"
- "Mmmm... va, ¿dónde y a qué hora nos vemos?
- "En mi casa, a las 10:20 pm; llega antes porque a las 10:30 pm me quedé de ver con mi cuate frente al Gibas"
- "Sobresssss"

No lo pude evitar, seguí jugando GTA hasta las 10:15 pm. "Ay, cuánto me puedo hacer a casa del Chalo, si me hago 20 minutos a la chamba que está al otro lado de la ciuda"#, me decía Mi Mismo. Pues me hice casi 20 minutos a casa del Chalo; o sea, a la mitad del trayecto tuve que entrar en GTA Mode para llegar, porque de plano el tráfico y la gente de plano venían en la lela.

Para no hacerles el cuento más largo, paso por el Chalo y Clau. Nos topamos con sus amigos, entramos al lugarcillo este (que es donde antes estaban los otros tacos árabes) y luego nos alcanzó la amiga de Clau. A modo de comercial, el lugar está chido (aunque el mobiliario no tanto); nos antendieron bien y la música estuvo de pelos (puro alternativo y grunge).

Entre el Chalo y un servidor hicimos una rápida reseña de nuestras aventuras juntos, incluido el Antochu. Incluso apareció el Cámara, coprotagonista de aquella historia resumida en la frase: "No cámara, no cámara".

Salimos como a las 2:30 am del lugar, para irnos cada quién en su cantón. Para serles franco, todo pasó muy rápido, pero recuerdo que iba bacilando a Chalo y a Clau; frente al carro, Chalo trata de defenderse diciendo: "Es que nunca lo entenderas; esto es algo de hombres". No entendí, pero pensé que se lo decía a Clau. "Ay caramba, pero se supone que la debía de defender, no echarle carrilla... ¿qué le pasa al Chalo?". En eso, nos cae el veinte a los tres de lo que dijo el menso. En vez de decir "esto es algo de pareja", dijo "esto es algo de hombres". Risas y golpes en el carro.

En fin, 2:45 am en mi camita, esperando descansar lo suficiente para:

1) Ver el Super Bowl
2) Jugar GTA

Que hermosa es la vida.

¿Mande? ¿Qué tiene que ver el blog con eso 'esas pequeñas diferencias'? No manches, ¿se los tengo que explicar? Ok, primero es la diferencia entre el ritmo de vida de Alex y la mía y segundo es una ironía del la frase de Chalo, ¿ya? Asshh.

* Sí, 6 horas. Sí, ya sé que de la 1:00 pm a las 8:00 pm son 7 horas. No, no descubrí como brincar en el tiempo; aun lo leo "La Filosofía del Viaje en el Tiempo". No, lo que pasa es que llegó el señor de la renta dos veces a la casa, más la vez que el dueño del departamento de arriba llegó a hablar conmigo y cuando subí abrirle la puerta porque se había quedado encerrado en el área de srevicio, más el tiempo que invertí haciendo de comer y las idas al baño, es como una hora de tiempo, ¿ya?

# Sí, así, "al otro lado de la ciuda"

Nunca se quejen

¿Alguna vez han estado encerrados con un enfermo, en el mismo, y el enfermo tose y tose, pero de esa tos grave y onda, que hasta creen que van a sacar las viseras? Bueno, pues según Rosario Castellanos, así es la persona que se queja.

Lo malo de quejarse, es que siempre te ocurren cosas peores después. La mayoría de ustedes lo saben: diario tengo una aventura. No, no deslizes amorosos, sexuales (morbosos), si no aventuras de todo tipo: desde ser interceptado por un tránsito hasta ser atacado con proyectiles cristalinos. Entonces, a veces realmente tengo motivos de queja. Pero de las veces que me quejo, resulta que me va peor. De eso que me quebaja, resulta que se vuelve dos veces peor de lo que era. Y no me ocurre una vez, si no varias.

El ejemplo clarísimo de eso es cuando comencé a viajar al final de cada semenstre. Fuere por avión o camión, algo me pasaba y me quejaba; pues la siguiente vez que viajaba, algo peor me ocurría. Ahora trato de disfrutar los viajes y me la paso tan bien...

Y si eso suena medio supersticioso, quejarse le da una mala imagen. La analogía que puse al principio es eso. ¿A quién le gustaría estar en la situación que describía? Estoy seguro que a nadie (dejémos a un lado eso de que si te importa la persona, y el amor, y shala lala, que saben que no viene al caso). Una persona quejumbrosa es una persona que termina por quedarse sola o soportada por unas pocas personas, porque es molesta. Es una piedra en zapato, el cadillo que se enterro jugando fútbol, el pelo en la sopa, la mosca en el refresco, el zancho con tu novia... eso es un quejumbroso.

Desde luego que hay ocasiones en el que un reclamo vale. Como por ejemplo, hacerle ver a una persona que no cumplió con una promesa o te están dando mala atención en algún lugar. Yo he aprendido por la mala a que no debo quejarme; ahora he cambiado mi perspectiva. No me quejo, no; me aguanto o trato de hacer una observación lo suficientemente objetiva.

En fin, dejando a un lado muchas cosas sobre filosofías, creo que todo es una cuestión de actitud. No es tanto como "qué haces tú para mejorar las cosas", o "en vez de quejarte, deberías hacer algo". Porque hacer notar algo que está mal, es hacer algo; porque hay veces que no sabemos cuando hacemos algo inadecuado.

En esta ocasión, sobre este asunto, recuerden que el quejarse en exceso es malo (Bacardi ya lo decía: "nada en exceso, todo con medida"). Quejarse es malo cuando se vuelve deporte; cuando nos quejamos de todo y todo está mal. También está mal no saber escuchar quejas; no porque todas sean válidas, si no porque algunas puede que tengan razón. Quizá ninguna valga, pero el hecho de analizar por qué pudieron haberse generado, ya es ejercicio suficiente para hacernos mejores.

Ah, esas mujeres II (El admirador de las mujeres)

No hace mucho una amiga me dijo que me gustaba criticar a las mujeres en mi blog. El pedí que me dijera en qué momento lo hice, porque hasta donde recordaba no lo había hecho. No puedo negar que de repente, cualquier hombre, siente la necesidad de criticar a las mujeres; ya ven a José Alfredo, escribió varias canciones sobre eso. Al igual que José Alfredo, si he críticado a las mujeres, también he escrito cosas buenas acerca de ellas.

A veces se dice que 'no se puede vivir con ellas, ni sin ellas'. Pero, en general, pudiera decir que soy un admirador. Así como los que observan la vida silvestre, como las aves u otros especímenes, me gusta observar a las mujeres.

Y no precisamente desde un punto de vista físico, que empezando por ahí hay mucho que disfrutar. ¿Quién se puede resistir a no mirar a una chava en biki?, o yendo por ahí, de repente ver a una de esas chavas con blusa de tirantes y buen escote, ¿quién puede evitar mirar hacia dentro del escote? Ni se diga de las que no traen bra en esas ocasiones. ¿Qué dicen de los pantalones pegaditos, especialmente los blancos?, ¿y las minifaldas? Quisiera recalcar un hecho que KillerFry alguna vez dijo: mujer que enseña, es porque quieren que la vean. Digo, muchas lo negaran, pero es cierto. No puedo negarlo, hay mujeres que conozco que admiro su físico; no precisamente porque se perfecto, escultural, de miss universo ó de modelo. Hay en el cuerpo de algunas mujeres que me trae; algunas serán sus boobies, otras seran sus piernas, su trasero (olvide cómo se decía la palabra padre para trasero, sorry), las caderas, su manos, rostro, labios, cabellos, ojos... bueno, Dios mío, no lo puedo evitar.

Observarlas, nada más observarlas, verlas. Ver como se mueven, como se deslizan de repente, a veces con dulzura, otras con delicadeza, feminidad.

Pero no es sólo lo físico lo que me hace pasar noche sin sueño. Es de por si ellas, o sea, su manera de pensar o de hacer las cosas. Paso el tiempo tranto de decifrar sus 'sí's que son 'no's; porque un día te dicen que te quieren y te adoran, pero al que siguen te tratan como desconocido; las admiro porque se preocupan por oler bien, por sentirse bien, por verse bien; porque cuando te quieren, te consienten, te procuran. Porque son otro mundo y ya. Porque las mujeres sienten como los hombres, piensan como nosotros, pero desde el otro lado de la calle. Porque... porque no sé, siempre hay algo en ellas que me apasiona; que sin importartar cuántas veces diverjamos, aun vuelvo a ellas, porque me facinan.

Tan solo hay que ver que mi Igual es una mujer. Quizá lo siguiente se escuche un poco en contra de lo que siempre pregono, pero no es así; pero, el día que encuentre a una como a mi Igual ( o por qué no, a mi Igual), creo que no necesitaré admirar más mujeres que a ella.

Esperar o no esperar... he ahí la cuestión

¿Recuerdan la última vez que planearon algo? Pero planear, lo que se dice planear, nada de ideas al aire. Yo sí lo recuerdo y por un poco más, usaba claves y códigos secretos con mis complices, como en las películas.

¿Han planeado algo - fuera del trabajo - lo suficientemente elaborado como para estar fuera de la rutina y lo común? Y bien, ¿resultó cómo lo esperaban? Bueno, aquella ocasión todo salió a pedir de boca; el final que yo deseaba no se cumplió, pero se dió el final planeado. De hecho, de las pocas que he pleneado y salieron como esperaba.

Es curioso, pero a veces esa frase de "ten cuidado con lo que deseas, porque se te puede cumplir" cobra mucho sentido en mi vida. Varias de las cosas que deseo y creo que se cumpliran, se cumplen. Siempre con reglas, como por ejemplo: "Si se presenta, no quiere decir que tendrás la cosa completa". ¿Recuerdan la película de "The Devil's Advocate"? En una enumeración similar a la que Al Pacino le da a Keanu Reeves, les presento las reglas: "Te puede gustar, pero no puedes platicar con ella; puedes platicar con ella, pero no puedes salir con ella; puedes salir con ella, pero no puedes tocarla; puedes tocarla, pero no puedes besarla; puedes besarla, pero no puedes andar con ella; puedes andar con ella, pero no será tuya".

Y aquí es donde ustedes pregunta: "Ajá, ¿y luego?". Bueno, juntando ideas. Prefiero no esperar las cosas y que ocurran como deben de ocurrir, a planearlas. De todos modos, al planearlas resultará lo mismo que si no espero y me requiere menos esfuerzo. En este tipo de circunstancias, la regla del esfuerzo mínimo es más que válida.

Porque, vamos a ver... ¿para qué recorrer una trayectoria en varios vectores, si el vector resultante siempre es el mejor? En mi caso, el vector resultante es esperar... como quiera voy a llegar al mismo lugar, con la mejor trayectoria: la más corta o la del menor esfuerzo.

Entonces si me preguntan: '¿las cosas salieron como esperabas?' Diré que no esperaba nada (o mejor dicho, que esperaba cualquier cosa o lo que fuera) y que las cosas salieron como debieron salir, ni bien ni mal, sólo como deberieron de haber sido. Porque de planearlas, podría decepcionarme; si las planeo saldrán como si no las esperara. Entonces, mejor que sea lo que tiene que ser, ¿no?.

(Original: 07092005)

Una noche en el Koko

(Este blog lo comencé a escribir durante la semana del 19 de septiembre del 2005. Lo encontré recientemente y quisé terminarlo. Regresar a los blogs de aquellas fechas ayudará a ubicar qué era lo que estaba pasando en aquellos días)

"Cuando veo a través del vaso, veo a través del tiempo..."
- 'No dejes que...', Caifanes


Antes que nada... Oscar, ¿te acuerdas quién me pasó el primer disco de Avril Lavinge?

Imaginen esto: Estar sentado, en un silla alta, sosteniendo en una mano una cerveza y la otra recargada sobre la mesa. El lugar está escásamente iluminado, con luces azules y rojas. A su alrededor hay mucha gente, pero la suficiente para llenar el lugar, pero no tanta como para estar apretujado ó incómodo.

El lugar es ambientado con música alternativa, grunge, heavy metal, rock, hard rock, punk, de repente electrónico, reggae, balada rock. Todas las canciones que escuchas, también las puedes ver, porque ponen el video de la canción. Entonces pasan, una tras otra, muchas canciones que te gustan; comienzas a cantarlas, y contigo, toda la gente que te rodea. Todos corean las canciones, y lo hacen con tantas ganas, que ya no se escucha la música, si no las voces de todos.

Sigues disfrutando tu cerveza; la mezcla de música, videos, gente, iluminación y lugar te hacen sentir feliz. Sonries satisfecho, contento... sumergido en ese relax y estado anímico, que es como si estuvieras flotando.

Pues bueno, así me siento cada vez que ando en un lugar tan de mi ambiente, como lo es el Koko Loko. Ahí me han pasado cosas raras, afortunadamente, nunca nada que lamentar. Pero por lo regular acabo en una mesa, sólo ó acompañado, sentado viendo los videos, cantando ó brincando. Es una especie de liberación para mí.

Y vuelo, de verdad. Vuelo en el tiempo, en los recuerdos, en las imágenes y las personas. Por escuchar una rola, puedo recordar de repente tantas cosas: veces que visité el lugar, cosas que pasaron con esa rola, recuerdos relacionados, sentimientos, emociones... no sé, me emociono nada más. Y ahí sentado puedo 'ver cosas que fueron, cosas que son y que cosa que aun no ocurren'. Por ejemplo, con la rola de 'Jane Says' re cuerdo la vez que fui con la Cuñis y la Bola (de verdad, fue por la curva); con la rola de 'Star Guitar' me acuerdo de la vez que después del Motel (el antro, no mal piensen) fuimos a dar ahí con una gringa safada y que le dieron ganas de besarme después de que me senté de bailar esta rola; con 'Even Flow' me acuerdo de la vez que llegaron los niños de UT y me quedé con esta niña, que por poquito más... bueno, por un poquito más nos la hubieramos pasado muy a gusto. De hecho, aunque nunca fui con Mine al Koko Loko, compartiamos el gusto por el lugar y sé que frecuentemente ella asistía; de repente veo su fantasma caminar entre la gente.

La última vez que fui al Koko, me la pasé bien. Como muchas veces, buena música, un buen de gente y buen ambiente. En esta ocasión estuve un poco más desconectado que otras veces, pero era porque tenía algo entre manos (mal pensados). Estaba concentrado en una niña, que por x o y circunstancias fuimos a quedar juntos en el mismo lugar y en la misma mesa. Conocerla a ella no era azar, lo era quedar juntos en ese momento. Después de que vi y escuché lo que necesitaba para aprender, al final, cuando todos se iban, me acerqué a ella para invitarla a salir. ¿Ella vale la pena? Claro que vale la pena; oh sí. No estoy seguro de nada, pero la sola contemplación de lo que puede ser me emociona. Ya veremos qué pasa en la semana; si no, mi estimado Camarón, 'de regreso al libro de colorear'.

En fin, no porque esto o aquello deje de pasar, yo dejo de disfrutar estos momentos alucinados. La vida sigue y la música también.

viernes, 3 de febrero de 2006

La Ausente

Creo que no me engaño, porque si me lo pregutan no lo negaré. No negaré que extraño mucho a la Ausente. La extraño mucho; otros días más que otros.

El miércoles pasado Camarón me dijo algo que me hizo pensar en que él la había visto. Me emocioné mucho; afortunadamente estaba en el messenger y pude disimular, si hubieramos estado en persona hubiera sido más difícil.

De repente hay días que encuentro en alguien algo de ella y me vuelvo loco. Hay veces que la sola expectativa de entrar en contacto con ella, o que alguien lo
haya hecho, basta para mover muchas cosas en mí. Hay días que tengo la sensación de haber estado cerca de ella. Todo depende de qué parte de ella haya aparecido.

De hecho, creo que no hay muchas mujeres que me juegen bromas; tampoco recuerdo chavas que me sigan la corriente en con mis bromas. Últimamente no ha habido chavas con las que pueda conversar horas de cosas que no sean existencialistas; me sobrarían los dedos de una mano para decir cuántas chavas me hablan para invitarme a salir. De hecho, con esos mismos dedos puedo contar cuántas chavas me han buscado no para pedirme favores, si no para charlar conmigo.

La Ausente tuvo detalles que aun nadie a tenido conmigo. Cosas como tomarnos cheves (sin límite) sólo los dos; llevarme de comer porque estaba harto de la comida de Centrales; invitarme al museo; irme a ver al hospital, llevarme globos y un muñeco; pagar mi cuenta. De hecho, de las cosas que me encanta recordar, es de las veces que jugabamos rummy y apostabamos la cuenta. De hecho, nuestras platicas eran tan intensas que a veces terminabamos con dolor de cabeza o exhaustos; y en esas pláticas podíamos reír por horas. También discutíamos muchas cosas, cosas importantes, no sólo para los dos, cosas que pasaban aquí y en cualquier parte. Era raro que nos platicaramos chismes, por lo regular eran cosas muy existenciales, poco convensionales; pero sobretodo hablábamos de nosotros: quiénes eramos y de dónde veníamos. O no, sencillamente recapitulabamos la historia de cierto artísta o qué sentimos cuando vimos 'x' o 'y' película u obra de teatro.

Como persona, cuando ella estaba convencida de que la había regado, me pedía disculpas o perdón (aunque en realidad ella sabía que no necesitaba hacerlo). Si yo la regaba y ella se daba cuenta, me decía lo que había hecho y me regañaba; también, si andaba mal vestido o desaliñado, me regrasaba para ajustar esa falta. Me sentía importante, porque - aunque a veces no quería - la ayudaba a hacer tareas o trabajos (o lo que necesitará) y siempre resultaban bien.

La Ausente es una amiga, muy buen amiga... excelente amiga. Y la quiero, la quiero mucho. Y la extraño demasiado. A veces me parece una eternidad el tiempo que no hemos compartido, como si hubiera sido en otra época, otra vida o quizá nuestra vida hubiera coincididó sólo un largo sueño.

El miércoles que Camarón me preguntó por ella, sentí como si ella estuviera a punto de aparecer. Y fue mucha la emoción. Me di cuenta que la extraño, la extraño de verdad; no sé qué sea, si las cosas quedaron volando o de verdad ella hacía una diferencia en mi vida. Porque cuando encuetras a tu similar y se va, las cosas no pueden ser igual.