"No me hubieras dejado esa noche,
porque esa misma noche encotré otro amor...
seré por siempre tu amante, tu novia... la soledad"
- Esa Noche, Café Tacvba
- Esa Noche, Café Tacvba
Creo que siempre he tenido dos verdaderos amores: la música y la soledad. Creo yo sería una especie de Chopin moderno, claro, sin su genialidad.
Creo - también - que la música y la soledad se complementan bien. La música se disfruta en muchos lugares y circunstancias; pero cuando se busca llegar a lo más profundo de ella, se necesita estar a solas, para poder poner atención a cada minúsculo detalle.
Se podría decir que es una relación polígama la que existe entre la música, la soledad y yo. Lo mejor es que las dos siempre están para mí, cuando las necesito y a veces hasta cuando me he olvidado de ellas.
La música y la soledad son - por excelencia - incomparables sanadoras. Escogiendo la música adecuada con una dosis de tiempo a solas, se pueden sanar las heridas y levantarse de nuevo. De hecho, con la música correcta y unos buenos audífinos, se puede separar al mundo físico y ser transportado a un estado de soledad, donde parece ser que sólo existo yo... situación ideal para pensar y trabajar.
Aunque podría casarme con la música, creo que la soledad no es una buena compañera para la eternidad; en la poca o mucha relación con ella me doy cuenta que podría llevarme a la locura. Pero, insisto, es una buena compañera de tiempo en tiempo; es como uno de esos amores imposibles, con el que te peleas, te distancias, regresas, amas con pasión, surgen problemas... Siento que la canción Esa Noche describe muy bien esa relación, al menos la que yo llevo con ella.
Insisto: no es que crea que lo mejor para mí sea la soledad. Sólo digo que es un buen refugio cuando es necesaria e inevitable. Es importante sostener una buena relación con la soledad, porque cuando se llega a ella por accidente, no es bueno ser recibido con su mala cara, porque en vez de curar, puede ser peor... y mezclado con música, se vuelve un peligro potencial, como mezclar drogas y alcohol.
En los últimos tiempos he tratado de que la soledad sea más un estado mental, a uno real. Me gusta estar virtualmente solo, en vez de estar realmente solo. Así, de vez en cuando me puedo escapar con mis novias... y pasarla bien a solas.
Muy cierto, la soledad es la única compañera que tenemos segura, por lo que hay que aprender a convivir con ella. Ayer una amiga me dijo: tienes que ver esto y asi es como llegué a tu blog, me encantó tu manera de definir la soledad y hablar de ella, quizas porque mi concepto es muy similar al tuyo. Y te he de confesar que tu manera de escribir despertó mi curiosidad y empece a leer desde tu primer relato registrado, sin darme cuenta leí los 68 que publicaste en el 2005. Ahora voy con los del 2006.
ResponderBorrarSaludos!
Ema
Hey Ema! Muchas gracias por tu comentario.
ResponderBorrarEspero que te siga gustando lo que escribo, por inútil que sea.
Sólo hay una cosa que me causa curiosidad, ¿quién te mostro el blog, quién es tu amiga?
Saludos!
Chahuistle
Hola!, no tienes nada que agradecer, simplemente a veces me gusta expresar lo que siento, y de verdad fue con toda sinceridad y respeto.
ResponderBorrarPues mi amiga se llama Veronica, y al parecer encontró tu blog por accidente(creo), la verdad es que no sé muy bien, simplemente le llamó la atención y pensó que debía leerlo también, y creo que hizo bien.
Oye... Tus relatos no tienen nada de inútil, al contrario se puede aprender algunas cosas de ellos, ya hasta tengo mis relatos favoritos, como aquellos donde hablas de las mujeres; y aunque quizás a algunas pudiera molestarles, yo simplemente sonrio, porque en realidad asi somos, coquetas por naturaleza, un poco interesadas (sólo un poquito), a veces nos gusta hacer sufrir a los hombres, etc, etc.
En fin, como te dije, ya estoy en medio de los relatos del 2006.
Saludos!
Ema